Cirugía de hemorroides láser: un procedimiento indoloro y eficaz
Las hemorroides o almorranas como también se les conoce son las varices o inflamaciones de las venas que aparecen en el recto o el ano, y es uno de los malestares proctológicos más frecuentes que afectan a mujeres y hombres por igual, por lo regular suelen presentarse alrededor de los 40 años, aunque pueden ocurrir en cualquier momento de la vida si no se toman las debidas precauciones.
¿Qué factores provocan la aparición de hemorroides?
Estos problemas son ocasionados por la falta de fibra en la alimentación, el estreñimiento, el embarazo, la diarrea, la vida sedentaria y la obesidad. Los problemas hemorroidales se clasifican en niveles, bien pueden ser de tipo I (de los más leves), hasta el IV (de alta gravedad) que implican la necesidad de someterse a una cirugía.
Lo que debes saber acerca de procedimiento de hemorroides láser
Ciertamente cuando se habla de cirugía de inmediato se piensa como un método doloroso, complicado, y de un mediano plazo para su recuperación postoperatoria, y por ello, se prefieren alternativas que van desde un cambio en la alimentación, laxantes, entre otros productos naturistas, pero si el problema persiste sin llegar a la erradicación o una posible curación de las hemorroides lo mejor es optar por una cirugía antes de que el problema se agrave.
Actualmente la eliminación de las hemorroides se realiza de manera segura, eficaz, causando el mínimo dolor y molestias en el paciente por medio de un procedimiento láser.
Las ventajas de este moderno tratamiento son:
Es una intervención mínimamente invasiva.
Se aplica una sedación anestésica.
Se realiza de manera ambulatoria (una vez realizada, el paciente puede regresar a su casa el mismo día sin complicaciones).
El procedimiento quirúrgico es indoloro y con él se logra el cierre de la arteria hemorroidal.
No se requiere aplicar alguna incisión, sutura o puntos internos.
Los resultados son inmediatos y a largo plazo.
Como se observa, la cirugía de hemorroides láser no implica mayor complejidad durante su procedimiento, ya que se realiza de una manera sencilla y lo mejor de todo: evita el dolor que puede concentrarse en una zona del cuerpo de amplia sensibilidad, los riesgos son casi nulos y el paciente puede seguir con su vida normal apenas unas horas después de que se practica la cirugía, sin duda esta opción es una de las mejores para olvidarse por completo de las molestas hemorroides.
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